Nueve piezas, a cual mejor. Todas diferentes, de composición colectiva, pero claramente reconocibles, identificables, en esta manera de decir tan personal, tan agrupada, tan banda en el mundo de las individualidades que es el jazz.
Una música nueva para este tiempo de espacios abiertos; música contra el hermetismo, música valiente sin apego a la tradición, con sede en la nube, para todos, para todas las culturas, para todos los mundos que hay en este mundo.
Nos presentan un nuevo instrumento, el hang, que lo impregna todo, que lo unifica, que le da carácter; percusión de la buena que le proporciona el aire que respiran las composiciones, el flujo de las aguas que descienden río abajo.
Cada nueva pasada proporciona nuevos descubrimientos, detalles no apreciados, nuevos colores, más madera.
En estos tiempos de música virtual, desprovista de soporte físico, estamos ante un disco verdaderamente redondo. Pura frescura, puro deleite. Altamente recomendable.
Hola e-soliloquio. Ya me tocaba pasarme por tu blog :), tantas contribuciones tuyas al mío se lo merecen.
Y la verdad es que me ha fascinado este cuarteto con su música. Realmente relaja, cierras los ojos y es como si estuvieses viajando por las plácidas aguas de un río, camino a la serenidad total.
Hola e-soliloquio. Ya me tocaba pasarme por tu blog :), tantas contribuciones tuyas al mío se lo merecen.
Y la verdad es que me ha fascinado este cuarteto con su música. Realmente relaja, cierras los ojos y es como si estuvieses viajando por las plácidas aguas de un río, camino a la serenidad total.
Saludos Gorgonitas.
Y si de verdad lo hacen a la vez, además de sonar muy bien, se merecen un segundo aplauso por esa magnífica coordinación.
Saludos Gorgonitas.
Bienvenido de nuevo.
Me alegro que te gusten. El disco entero es una maravilla. Y son gente muy joven.
Un saludo
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